Por su parte, Matt Garman, CEO de AWS, señaló que la infraestructura de AWS servirá como “columna vertebral” para las ambiciones de OpenAI.
Este acuerdo es significativo por varias razones, pues rompe en parte la dependencia que OpenAI tenía exclusivamente de Microsoft como proveedor de nube. Para AWS, representa una validación de su capacidad de ofrecer infraestructura de IA a escala plena, justo cuando la demanda por cómputo intensivo explota.
Desde una perspectiva tecnológica, demuestra que la batalla en inteligencia artificial ya no es solo sobre modelos y datos, sino sobre infraestructura física, como son servidores, chips, centros de datos, latencia, eficiencia energética, de acuerdo con expertos consultados por The Verge.
Para América Latina y México implica que la oferta de servicios de nube y de IA podría comenzar a ampliar su escala, precio y alcance, lo que abre oportunidades para empresas mexicanas que busquen entrenar o desplegar modelos de IA.
Las empresas mexicanas que están desarrollando IA, ya sea en fintech, salud, retail o industria, podrían beneficiarse de una infraestructura más robusta y competitiva gracias a este tipo de acuerdos globales.
El acuerdo de 38,000 millones de dólares es un hecho que marca el cambio de paradigma en la IA y que fortalecerá la alianza de estas empresas por los siguientes siete años, según su comunicación oficial.




